Hazlo sin tapujos ni vergüenzas. De la misma manera que nos gustaba ponérnoslas cuando éramos pequeñas y todo valía para lucir la cabecita más molona.
Los pasadores de pelo vuelven con aire retro, con un toque vintage y añejo que nos lleva directamente de vuelta a la Sicilia de los años 90. Raya al medio y engominada, o hacia un lado y despeinada. Todo vale.
De aires minimalistas, con pedrería e incluso un paquete entero de 20 horquillas básicas adornando una coleta baja. Si te atreves cualquier combinación será una apuesta ganadora.





